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Las claves de los neumáticos para bicicletas de montaña

Un repaso a las especificaciones de tamaño, compuesto, TPI, carcasa y taqueado para elegir el neumático perfecto para una bicicleta de montaña.

A la hora de elegir neumático para nuestra Mountain Bike, hay que tener presente que existen diferentes características que definen a cada tipo de cubierta, todas ellas estrechamente relacionadas con el tipo de conducción y terreno al que están destinadas. Tamaño, compuesto, TPI, carcasa y tipo de taqueado son las claves a tener en cuenta para elegir el tipo de cubierta que más nos conviene, y por ello nada mejor que un rápido repaso al significado de cada una de estas características clave.

En TodoMountainBike: Las claves de los neumáticos para bicicletas de montaña

Características de un neumático de Mountain Bike

¿Qué compuesto elegir? ¿Qué es el TPI de la carcasa? ¿Qué ancho necesitamos? Las respuestas a estas preguntas varían en función de las necesidades de cada ciclista, pero todas ellas pueden ser resueltas conociendo de antemano el significado de cada una de dichas características.

1. El compuesto: se puede traducir como la densidad del taco de la rueda. El compuesto viene expresado con un número, normalmente seguido de la letra 'a'. Los números más bajos hacen referencia a compuestos o tacos más blandos, propios de cubiertas más adherentes. Los números más altos hacen referencia a tacos más duros, buscando un mayor rendimiento y durabilidad de la cubierta en detrimento de la adherencia.

2. La carcasa: los diferentes tipos de carcasa se clasifican en función de su TPI, siendo el TPI el número de hilos que contiene cada pulgada de la cubierta. A mayor densidad o cantidad de hilos (TPI), menor cantidad de goma tendrá la carcasa y será, por tanto, más ligera y sensible a los pinchazos y pellizcos. Las cubiertas utilizadas en Descenso suelen tener una densidad de 33 TPI, mientras que las utilizadas en XC rondan los 127 TPI, mucho más ligeras pero menos resistentes que sus homólogas de DH.

3. El taqueado: las cubiertas, incluso en un mismo modelo, pueden contar con diferentes tipos de taqueado en función del rendimiento esperado de las mismas. Los tacos altos se clavan en terrenos blandos y se retuercen en terrenos duros. Los taco bajos son eficientes en terrenos secos, pero en firmes mojados pierden eficacia y acumulan mucho barro. Los tacos muy unidos son ideales para terrenos compactos donde la superficie de contacto es mayor, aunque tienden a acumular barro. Los tacos separados presumen de buena evacuación del barro y óptima penetración y adherencia sobre terrenos medios y blandos, pero pueden retorcerse sobre terrenos duros.

4. El ancho del neumático: la anchura del neumático influye de forma directa en el rendimiento del mismo. En las modalidades donde la velocidad es un factor importante, como el XC/Maratón, las cubiertas utilizadas suelen rondar las 2.0 a 2.2 pulgadas de ancho. En las modalidades más agresivas del ciclismo de montaña, las cubiertas cuentan con un ancho de 2.3 pulgadas o superior, favoreciendo así una mayor superficie de contacto del taqueado específico para la modalidad destino del neumático en cuestión.

5. Compatibilidad Tubeless (sin cámara): básicamente, el mismo concepto que los neumáticos sin cámara para coches y motocicletas. En la actualidad, encontramos cubiertas Tubeless UST, que teóricamente no necesitan líquidos sellantes para quedar completamente selladas (siempre acompañadas de llantas UST) y cubiertas Tubeless Ready, que necesitan líquido y cinta sellante para garantizar un sellado completo. Las cubiertas compatibles con sistemas Tubeless suelen contar con una carcasa más resistente y flancos más sólidos, por lo que se presentan como la opción más aconsejable a la hora de elegir nuevo neumático.

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