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Siete hábitos nada saludables que todo deportista debería evitar

La salud es una de esas cosas que influye directamente en el estado anímico de una persona, en el rendimiento de un deportista y, por...

La salud es una de esas cosas que influye directamente en el estado anímico de una persona, en el rendimiento de un deportista y, por supuesto, en la forma física de cualquier ciclista. Disfrutar de una buena salud nos proporciona un rendimiento óptimo en los entrenamientos, una mejor calidad de vida y un mayor estado de bienestar personal; aspectos que lamentablemente no siempre resultan fáciles de conseguir. La salud está ampliamente ligada a la práctica regular de ejercicio físico, pero también a nuestros hábitos de vida; algunos de ellos muy extendidos y, lo más importante, muy poco saludables.

Siete hábitos nada saludables que todo deportista debería evitar

Los hábitos más comunes que perjudican nuestra salud

La salud es una de las cosas más importantes que debemos cuidar a lo largo de nuestra vida, desde el momento en que nacemos hasta la hora de nuestra muerte, con el fin de disfrutar de la mejor calidad de vida posible en el intervalo de tiempo que separa nuestra llegada al mundo de nuestra triste despedida final. Por este motivo, resulta especialmente relevante conocer cuáles son los hábitos más extendidos que perjudican nuestra salud de forma directa, todos ellos muy fáciles de evitar si realmente nos lo proponemos:

  • 1. No practicar deporte regularmente. El deporte es una de las mejores maneras de poner en forma nuestro cuerpo y nuestra salud. Correr, caminar, ir en bicicleta o ir al gimnasio son buenas opciones para mejorar nuestra salud, pero siempre que las realicemos de forma regular. Ser un guerrero de fin de semana que pasa la semana trabajando y realizando vida sedentaria puede resultar incluso más peligroso que ser una persona completamente sedentaria, ya que el esfuerzo puntual que nuestro cuerpo debe soportar durante el fin de semana puede provocar serias lesiones e incluso problemas mucho más graves de tipo cardiovascular, tales como fallos cardíacos, colapsos y muerte súbita.
  • 2. Saltarse el desayuno. El desayuno es una de las comidas más importantes del día, y nunca deberíamos pasarlo por alto. Cuando dormimos, nuestro cuerpo ralentiza su metabolismo y, tras 7 u 8 horas de sueño reparador, necesita urgentemente un desayuno saludable para volver a funcionar de nuevo como es debido. Cuando nos saltamos el desayuno, nuestro cuerpo mantiene el metabolismo ralentizado y nuestros niveles de energía se encuentran bajo mínimos, dando lugar a una de esas jornadas largas, pesadas y agotadoras que todos/as conocemos muy bien.
  • 3. Fumar. Fumar es uno de los hábitos menos saludables y más extendidos de nuestro planeta. La adicción provocada por el tabaco es tan grande que, a pesar de que la mayoría de fumadores/as ya conocen los efectos negativos del hábito de fumar, continúan expulsando bocanadas de humo haciendo oídos sordos. El tabaco provoca cáncer, impotencia masculina, disminución del rendimiento físico, problemas cardiovasculares, insuficiencia pulmonar y envejecimiento prematuro de la piel, entre otros efectos nada agradables. Dejar de fumar es una apuesta segura hacia un mejor estado de salud a nivel general.
  • 4. Exponernos a los dañinos rayos del sol. Probablemente, a todos/as nos gusta estar bronceados/as, pero también debemos tener en cuenta que el sol es, además de fuente de vida, uno de los principales causantes del envejecimiento prematuro, las arrugas y el cáncer de piel. En el caso de los ciclistas protegernos del astro rey merece una especial atención, debido al excesivo tiempo de exposición solar al que nos vemos sometidos durante nuestras rutas, en la mayoría de los casos, sin utilizar ningún tipo de protección. Usar cremas específicas bronceadoras con un factor de protección solar adecuado a nuestro color de piel es la mejor manera de evitar cualquier tipo de problemas en nuestra piel.
  • 5. No descansar lo suficiente. Durante muchos años, la medicina ha recomendado dormir unas 8 horas diarias para disfrutar de un ciclo de sueño completo que nos permita desarrollar nuestras actividades diarias con el 100% de energía. La privación de sueño provoca ganancia de peso, depresión, ansiedad, propensión a un fallo cardíaco e incluso una mayor resistencia a la insulina, por no hablar de los accidentes derivados que un estado de alerta mental limitado por la falta de sueño puede ocasionar. La solución más sencilla no está mucho más lejos que nuestra cama y un horario más saludable que nos permita disfrutar de unas 7 u 8 horas de sueño por jornada.
  • 6. Beber calorías que no necesitamos. Las bebidas alcohólicas, refrescos azucarados y bebidas deportivas están cargadas de calorías realmente dañinas para nuestra salud en caso de ser consumidas en exceso. Consumir con moderación este tipo de bebidas y controlar las calorías que consumimos a través de refrescos, zumos, copas, café o infusiones es de vital importancia para evitar excedernos en las calorías recomendadas que necesitamos según nuestra condición física. El excedente diario de calorías que consumimos pasa a formar parte sin ningún tipo de pudor de nuestros depósitos de grasa.
  • 7. Evitar las visitas al médico. Otro de los errores más comunes que la mayoría de personas cometemos es aplazar o evitar celosamente las visitas a nuestro médico. Ante la aparición de cualquier tipo de problema de salud nunca debemos esperar a que se solucione de forma natural, ya que podría tratarse de síntomas tempranos de enfermedades mucho más complejas o graves que debemos tratar desde el primer momento. De una manera o de otra, ante la aparición de cualquier tipo de problema de salud, la mejor opción pasa por visitar nuestro médico de cabecera, siendo también muy recomendable realizarnos una revisión anual (como mínimo) en el caso de practicar deporte de forma regular.

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