Como todo buen deportista sabe, entrenar en verano es sinónimo de pasar muchas horas bajo el sol perdiendo litros y litros de sudor. Lógicamente, a la hora de practicar ejercicio en estas condiciones debemos mantener una óptima hidratación de nuestro organismo, haciendo uso de agua, bebidas isotónicas, geles y barritas según sea la intensidad y duración del ejercicio en cuestión. Una vez finalizada la sesión de entrenamiento y con nuestro organismo pidiendo a gritos un descanso y combustible para su recuperación, nada mejor que un batido a base de ingredientes naturales, bien cargado de proteínas e hidratos de carbono y, por supuesto, bien fresquito.
Cómo preparar un batido de proteínas helado
Después de un entrenamiento especialmente intenso o tras disputar una competición, nuestro organismo se encuentra en un estado especialmente receptivo, conocido en el mundo de la nutrición deportiva como ventana de la oportunidad. En este estado, presente durante aproximadamente las dos horas posteriores al ejercicio, nuestro cuerpo asimila mucho más rápidamente todo tipo de nutrientes para favorecer la recuperación muscular y la reposición de sus depósitos de glucógeno, siendo el momento ideal para consumir un saludable, económico y delicioso batido proteico-energético.
Ingredientes
- 70 gramos de clara de huevo pasteurizada y desnaturalizada.
- 250 gramos de leche desnatada (fría).
- 1 plátano.
- 1 cucharada sopera de miel.
- 4 o 5 fresas troceadas y congeladas.
Preparación
La elaboración de este batido es muy sencilla y rápida, siendo únicamente necesario disponer previamente de unas cuantas fresas (limpias y troceadas) congeladas. Para prepararlo, introducimos todos los ingredientes en un recipiente adecuado y, con ayuda de una batidora, los mezclamos hasta conseguir un batido de consistencia líquida y sin grumos.
Propiedades nutricionales (valores medios aproximados)
- Claras de huevo (70 gramos aprox.): 38 Kcal - 0,5 gramos de carbohidratos - 8,5 gramos de proteína - 0,15 gramos de grasa.
- Leche desnatada (250 gramos aprox.): 92 Kcal - 12 gramos de carbohidratos - 9 gramos de proteína - 0,5 gramos de grasa.
- Plátano (100 gramos aprox.): 118 Kcal - 26 gramos de carbohidratos - 1,3 gramos de proteína - 0,3 gramos de grasa.
- Miel (50 gramos aprox.): 150 Kcal - 40 gramos de carbohidratos - 0,3 gramos de proteínas - Sin grasa.
- Fresas (100 gramos aprox.): 32 Kcal - 7,6 gramos de carbohidratos - 0,7 gramos de proteínas - 0,3 gramos de grasa.
Como podemos comprobar, este batido nos aporta (aproximadamente) 430 Kcal con 86 gramos de carbohidratos, 20 gramos de proteínas y menos de 2 gramos de grasas, siendo especialmente recomendable su consumo tras haber realizado un entrenamiento intenso o tras participar en alguna competición. Además de un buen aporte calórico para reponer nuestros depósitos de glucógeno y de una generosa cantidad de proteínas para reparar nuestros músculos, los ingredientes naturales de este batido energético también incluyen vitaminas y minerales, muy útiles para reforzar nuestros huesos, mejorar nuestras articulaciones y mantener bien nutridas las castigadas fibras musculares de nuestras piernas.
La versión veraniega de nuestro batido proteico-energético incluye trozos congelados de fresas que, además de aportar un delicioso sabor, son las encargadas de enfriar el batido justo hasta ese punto que se deja notar en la garganta. Otra opción perfectamente válida es la de pelar y trocear el plátano para utilizar después los trozos ya congelados, prescindiendo así de las fresas si no somos muy amantes de esta fruta roja.
Nota: Como es habitual en TodoMountainBike, este artículo se refiere siempre a los efectos en personas sanas, no siendo recomendable el consumo de este batido bajo ningún concepto en todas aquellas personas que presenten intolerancia a algunos de los ingredientes del mismo. En este último caso, la visita a un médico especialista siempre será la opción más recomendable y segura.
